Peregrinación a Santo Toribio de Liébana
Quien dijo viaje fin de curso, nosotros nos fuimos los días posteriores a la Pascua, entre el 9 y 12 de abril a visitar Santander y peregrinar a Santo Toribio.
A nuestra llegada, nos alojamos en el Seminario Diocesano Monte Corbán y seguidamente realizamos una ruta andando hasta la Ermita de la Virgen del Mar acompañados y atendidos por su párroco D. Francisco.
El segundo día, visitamos el Parque Natural Cabárceno y disfrutamos de la naturaleza y los animales, un lugar precioso, Por la tarde, continuamos con la diversión y nos lanzamos por la tirolinas de junto al faro. altura, riesgo y risas, muchas risas. ¡Lo pasamos genial!
Fue en el tercer día de nuestro viaje cuando: peregrinamos caminando 2,5 Km a pie a Santo Toribio de Liébana y allí estuvimos en la misa del peregrino y veneramos el Lignum Crucis. Comimos en Potes y después pudimos visitar San Vicente de la Barquera municipio de costa de visita obligada si vas a Cantabria.
El viernes, nuestro cuarto y último día: pasamos el día completo en Santander, donde visitamos el Centro de Arte “Botín” un extraordinario edificio de mar en el que además aprovechamos la oportunidad de contemplar una muy interesante exposición. En nuestra posterior visita a la catedral cantamos a la Virgen ante los medios de comunicación (La 8 Santander) y fuimos recibidos por el arzobispo paisano nuestro, D. Arturo Ros que se interesó por nuestro viaje y experiencias en la ciudad. Ya por la tarde, nos han guiado en una visita por el Museo Marítimo de Cantabria disfrutando de su Aquarium y de la gente de mar. Regreso al seminario a descansar y fin de nuestro viaje porque tras el descanso madrugamos para coger el avión de regreso a casa.
¡Cansados pero contentos! Llegan nuestros escolanes a sus casas, con la mochila llena de experiencias vividas que sin duda van a recordar y con fuerzas para afrontar este intenso final de curso que nos espera. Gracias Santander por tu acogida y especialmente Liébana.
